O EL LENGUAJE CREA-CAMBIA REALIDADES
Según un estudio del Journal of Adolescent Health lxs jóvenes trans que son llamados por sus pronombres con los que se identifican, tienen 65% menos riesgo de suicidio.
El uso de un lenguaje inclusivo que no discrimine, invisibilice o reproduzca esquemas binarios es una de las principales formas de comprometerse con la defensa de los derechos de las personas LGBTIQ+.
Lo que pretende es ofrecer nuevas fórmulas en el uso del lenguaje que eviten el masculino como fórmula genérica, dando así visibilidad a la diversidad de posibilidades y variables que puede tener el género.
Aunque no existe consenso al respecto se han propuesto los usos de la e o la x en pronombres, adjetivos o principios que permiten nombrar y representar a personas de género no binario y trans dentro de los discursos.
Sin embargo entendemos que en muchos contextos nos enfrentemos a resistencias frente al uso de estas propuestas, por lo que existen otras formas de lenguaje, que evitan formulas sexistas y androcéntricas:
Usar el sustantivo “persona” (ej. los jóvenes > las personas jóvenes)
Usar nombres genéricos (ej. el ser humano)
Usar nombres colectivos o abstractos (ej. los alumnos > el alumnado)
Sustituir “el/los que” por “quien/quienes” (ej. los que asistan a la reunión >
quienes asistan a la reunión)
Omitir el sujeto (“Nosotros exigimos al gobierno…” > “Exigimos al gobierno…”)
Cambiar la sintaxis de la oración (“Los mexicanos están sufriendo los efectos de la crisis…” > “En México se están sufriendo los efectos de la crisis…”)